El presidente de la República, Daniel Noboa, presentó una denuncia penal contra Alejandro Muñoz, secretario general de la Asamblea Nacional, por presunta simulación y usurpación de funciones, según confirmó este último el jueves 9 de enero de 2025. Este delito, de acuerdo con la legislación ecuatoriana, se sanciona con hasta tres años de cárcel.
Muñoz explicó que la denuncia se dio tras notificar, en cumplimiento de su labor, la disposición de Ester Cuesta, presidenta encargada de la Asamblea, de devolver el Decreto No. 500. Este documento establece que Noboa encargó la Presidencia a Cynthia Gellibert, secretaria de la Administración, luego de designarla vicepresidenta interina.
El secretario calificó la acción judicial como «antijurídica e irracional», afirmando que busca intimidarlo. «No he cometido ningún delito y responsabilizo al Gobierno de Daniel Noboa por cualquier cosa que me pueda pasar a mí o a mi familia», declaró, denunciando también haber recibido amenazas dirigidas a detener su labor.
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La controversia del Decreto 500
El Decreto 500 emitido por Noboa aduce «circunstancia de fuerza mayor» para encargar la Presidencia a Gellibert desde el jueves 9 de enero hasta el domingo 12 de enero de 2025. Esta decisión ha sido rechazada por el Parlamento, que considera que el reemplazo debía recaer en Verónica Abad, vicepresidenta electa en las urnas.
Alejandro Muñoz insistió en que Noboa debió solicitar una licencia sin sueldo en lugar de justificar su ausencia con fuerza mayor, ya que está participando en la campaña electoral para las elecciones presidenciales del 9 de febrero.
La relación entre Noboa y Abad ha estado marcada por tensiones, siendo este nuevo episodio parte de una serie de desacuerdos que incluyen acusaciones mutuas y acciones legales.
Por su parte, el presidente busca cumplir con la normativa que le prohíbe utilizar su cargo como ventaja en la campaña electoral, que se extenderá hasta el 6 de febrero. Mientras tanto, la Asamblea Nacional ha reiterado su desconocimiento hacia la designación de Gellibert como presidenta encargada, abriendo un nuevo capítulo de enfrentamientos entre el Legislativo y el Ejecutivo.